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La portavoz en la Comisión de Políticas Sociales, Petri Romero, ha explicado que la Diputación de Gipuzkoa ha flexibilizado las visitas de las residencias, aunque ha advertido que la desescalada en los centros de mayores de Gipuzkoa debe ser “prudente” porque la vacunación es “efectiva”, pero no impide todos los contagios.

En su intervención esta mañana en el Pleno de las Juntas Generales de Gipuzkoa para tratar la moción presentada por EHBildu para la elaboración de nuevos protocolos de visitas de las residencias para mayores y dependientes, ha asegurado Romero quien ha explicado que, en las últimas semanas, la actual situación en los centros ha cambiado “sustancialmente”.

“A partir de marzo de este año, las residencias de Gipuzkoa permiten un mínimo de cuatro salidas y dos visitas por semana, por cada persona usuaria/o, con el objetivo de reforzar el contacto con familiares y allegados, que tan necesario es”.

Este protocolo ha sido trabajado, de forma coordinada, con las diputaciones de Araba y Bizkaia, y responde a las necesidades y capacidades tanto de las personas mayores como de los propios centros residenciales. Además, las medidas se han ido adoptando siempre teniendo en cuenta los niveles de alerta epidemiológicos y, evidentemente, el porcentaje de vacunación de cada residencia, pero siempre poniendo en el centro de la acción política el bienestar de los mayores, uno de los colectivos de riesgo en este tiempo de pandemia. De esta forma, hasta ahora sólo podía acceder a visitar a un familiar una única persona y el actual protocolo contempla que sean dos, al mismo tiempo, no teniendo que ser siempre las mismas.

Actualmente, dentro de la “prudencia”, entiende la juntera socialista que hay “margen de movimiento” y que el protocolo se puede flexibilizar, en cuanto la situación epidemiológica lo permita, siguiendo las recomendaciones del departamento de Salud del Gobierno Vasco.

Sin embargo, considera positivo poner en marcha una red de participación y evaluación de centros residenciales de Gipuzkoa, en el que participen tanto usuarios, como familiares y los propios profesionales de las residencias que han sido un aliado a la hora de reducir el alcance del miedo, la incertidumbre y la desesperanza entre los residentes.  El objetivo de esta red es el de evaluar la situación en cada momento con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas mayores

Asimismo, Romero ha querido poner en valor la gestión “sensata y eficaz” que el departamento de Política Social del gobierno de coalición de la Diputación de Gipuzkoa que ha buscado un equilibrio para blindar los centros con contagios y garantizar, al mismo tiempo, la calidad de vida y el bienestar de los mayores.

Sinhogarismo

Por otra parte, la juntera socialista, se ha referido a la situación en la que viven actualmente las personas sin techo, en tiempos de Covid-19. En el debate de la propuesta de resolución sobre sinhogarismo presentada por Podemos Gipuzkoa ha reconocido que debe preocuparnos, las personas que aún quedan en la calle y “las otras formas de estar sin hogar” que ahora se visibilizan más, aunque ya existían antes de la pandemia.

“Debemos ocuparnos de esas personas que no pueden volver a su habitación tras el alta hospitalaria, personas que vivían en pensiones y que han tenido que abandonarla porque las cerraban, mujeres trabajando como internas que tampoco han podido recuperar sus trabajos tras el alta”, ha explicado.

Romero ha resaltado que el PSE-EE, PNV y Podemos Gipuzkoa aprobó una enmienda transacción al proyecto de presupuesto foral para 2021, por un valor de 300.000 euros, para abordar el sinhogarismo desde el ámbito comarcal para evitar las desigualdades por municipios. Por eso, en la enmienda presentada por socialistas y jeltzales instan a estudiar las diferentes realidades de esta situación en Gipuzkoa.

Reconoce que hay numerosas casuísticas y que las instituciones tienen que hacer frente a “demasiadas”. Es por ello que la Diputación de Gipuzkoa y los ayuntamientos han ido adecuando distintos recursos. En concreto, el ente foral puso en marcha plazas en el albergue de Zarautz, San Juan de Dios, Orio y Hondarribia para dar cobertura a personas en situación de exclusión residencial “grave”. También reforzando ese servicio, el departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco activó distintos programas y el de mayor referencia es `Lehen Urratsak´ para ofrecer alternativas de alojamiento con apoyo y programas de integración social a las personas que viven en la calle antes del confinamiento.

La crisis sanitaria, -ha remarcado-, ha abierto una oportunidad para poder ayudar en la inclusión de las personas sin hogar. “Se ha tenido acceso a personas que nunca se acercan, ni se hubieran acercado, a la red de los servicios sociales en los diferentes niveles, y se ha tenido acceso a ellos, y se está trabajando con estas personas que van a poder empezar un proceso, que antes era impensable”.