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Lore Suárez: "Sólo con medidas preventivas y transformadoras lograremos reducir la tasa de pobreza energética"

Foto 1
Lore Suarez, juntera socialista

 

La juntera socialista, Lore Suárez, ha puesto en valor la labor que está realizando el departamento foral de Medio Ambiente de la Diputación de Gipuzkoa que dirige José Ignacio Asensio y que, a su juicio, esta gestión “es la que mejor contribuye a toda una estrategia” para reducir la pobreza energética en Gipuzkoa. Para ello, se están desarrollando acciones de carácter preventivo que contribuyen a reducir la vulnerabilidad energética y por extensión reducir la pobreza energética.

Sin embargo, la también concejala del PSE-EE de Pasaia ha querido insistir en un dato que es “importante” y es que Euskadi es una de las comunidades autónomas donde las familias tienen un mayor gasto energético doméstico y también donde hay una menor tasa de pobreza energética, pero donde hay las prestaciones “más cuantiosas” para ayudar a esos colectivos en situación de mayor vulnerabilidad.

A pesar de estos datos, para Suárez, hay que atajar esta situación con una política asistencial urgente y en este sentido, señala que desde el año 2015 existen partidas presupuestarias que permiten a muchas familias “desfavorecidas” a hacer frente al pago de su factura energética a través de la colaboración de entidades sociales como Cruz Roja. Además, “las medidas asistenciales se vienen prestando a través de prestaciones como las AES o el fondo de ayudas a la pobreza energética y con instrumentos como el bono social”.

No obstante, ha reconocido, en su intervención esta mañana en el Pleno de las Juntas Generales de Gipuzkoa, estas medidas son a corto plazo y son las “indispensables” para ayudar a los colectivos que disponen de recursos económicos “modestos o escasos”; pero debemos trabajar, “y así se está haciendo”, para que esta sociedad transite hacia “otro modelo energético” ante un problema “estructural”. Para ello, el Gobierno de España está desarrollando una estrategia nacional contra la pobreza energética 2019-2024 y que tiene como objetivo reducir el “impacto” de las facturas y aplicando reformas para “abaratar” la energía, así como la creación de un “nuevo” bono universal y una “mayor” protección al consumidor.

 “Un modelo que nos haga depender menos de los combustibles fósiles que, además son altamente contaminantes y costosos de producir, y promover la generación de energías más limpias y menos costosas como son las renovables” y que, “sin duda”, permitirá regular un mercado que tendrá un efecto “directo” en nuestras facturas energéticas.

De hecho, -como ha recordado-, entre 2018 y 2020 la incorporación en nuestro sistema energético de las renovables ha supuesto una reducción en el precio de las facturas en una media de 120 euros anuales, en una familia de cuatro miembros, reduciendo la factura eléctrica en 10 millones de hogares de los 25 millones de consumidores domésticos de electricidad que hay en nuestro país.

Por último, ha insistido en que debemos abordar el problema de la pobreza energética “de raíz”, con cambios y transformaciones en el marco normativo que nos haga transitar hacia un modelo energético “más justo, sostenible, menos dependiente y con mayores garantías para los consumidores”.