compartir
Hondarribia debe paliar el déficit de proyectos culturales con el palacio Ramery
IOSU ÁLVAREZ: “Pido al alcalde de Hondarribia que agilice el proceso de regularización del Palacio Ramery, ante la insistencia del Ministerio de Cultura y Deporte de la necesaria cesión del inmueble al Ayuntamiento como solución más factible para darle un futuro al edificio”
Para el grupo municipal socialista hay en Hondarribia un “déficit” de proyectos y programación cultural que debemos paliar con el Palacio Ramery, tras la posible cesión por parte del Ministerio de Cultura y Deporte del Gobierno de España de este edificio al consistorio, si el ayuntamiento da los pasos necesarios para regularizar la situación de la ocupación del edificio. Desde dicho Ministerio, en “varias” ocasiones se ha contactado con el ayuntamiento, tanto por correo electrónico como por teléfono, instando a buscar la solución “más factible”, que a juicio del Gobierno de España sería la cesión de dicho inmueble a Hondarribia.
En un comunicado, el portavoz socialista, Iosu Álvarez, ha instado al alcalde de Hondarribia, Txomin Sagarzazu, a agilizar el proceso de regularización de este edificio “histórico y singular” que tiene la localidad y buscar un uso cultural para asegurar su conservación. En este sentido, le ha pedido que no convierta el Palacio en un edificio de oficinas destinado a dar servicio al consistorio porque es un “legado” para esta ciudad, “nuestro patrimonio histórico” que debe ser preservado para las generaciones futuras de una forma “digna”. “Es más, si le damos un destino cultural dignificaremos el Palacio Ramery, que tiene un valor cultural y social fundamental para Hondarribia”, ha dicho convencido.
El palacio Ramery, situado en la calle Pampinot 16, en el casco histórico de Hondarribia, es un edificio que se remonta al siglo XVIII y está vinculado a los Ramery, una familia originaria de Flandes, que se estableció en el País Vasco en el siglo XVII. El inmueble fue donado a finales del siglo XIX por dicha familia y en la actualidad alberga la sede de la Asociación de Amigos de la Historia de Hondarribia y del Instituto Francisco de Ibero.
“La pandemia de la Covid-19 ha supuesto un revulsivo para nuestra economía y nos obliga a reinventarnos y adaptarnos a un nuevo mundo. Por eso, siempre hemos reivindicado la necesidad de diversificar la economía local y entendemos que una apuesta por el sector cultural que tiene un papel vertebrador y un enorme potencial, se puede convertir en un gran generador de riqueza y de promoción de nuestro municipio y, por tanto, de creación de empleo”. En este sentido, ha recordado que la cesión realizada desde el Ministerio que dirige Miquel Iceta se une a la inversión concedida por el Gobierno de España, en junio de este año, para la rehabilitación del Fuerte de Nuestra Señora de Guadalupe, adjudicando una subvención de 300.000 euros para su recuperación y, en definitiva, para impulsar la actividad turística y económica y también para mejorar la oferta cultural y patrimonial de Hondarribia.
Ha sido muy crítico con el gobierno municipal del PNV y sus “escasas” novedades para dinamizar un sector que es fundamental para el desarrollo de Hondarribia y que debería contar con proyectos y una programación cultural “ambiciosa”, desarrollando nuevas infraestructuras culturales como la que nos ofrece el Palacio Ramery. Necesitamos de un proyecto cultural “sólido”, con un planteamiento “serio”, que constituya una herramienta de promoción económica y turística y un motor de arrastre sobre otros sectores de la economía local, ha dicho para concluir.
